Ivermectina

La ivermectina está indicada para el tratamiento de la estrongiloidiasis (nemátodo; infección causada por un tipo de parásito que entra al organismo penetrando la piel, llega a las vías respiratorias y se aloja en el intestino).

Se usa también para controlar la oncocercosis (ceguera de los ríos; infección con un tipo de parásito que provoca sarpullido, protuberancias debajo de la piel y problemas de la vista, como pérdida de visión o ceguera).

Pertenece a una clase de medicamentos llamados antihelmínticos. En el caso de la estrongiloidiasis, actúa destruyendo los parásitos presentes en el intestino. En el caso de la oncocercosis, destruye los parásitos en desarrollo, sin embargo no mata a los causantes de la infección y, por lo tanto, no la cura.

La ivermectina viene en forma de tabletas para administración por vía oral. Generalmente se toma una dosis única en ayunas, con agua. Si tomas ivermectina para el tratamiento de la oncocercosis, es posible que necesites otras dosis a los 3, 6 o 12 meses para controlar la infección.

Sigue al pie de la letra las instrucciones de la receta. No aumentes ni disminuyas la dosis, ni la tomes con más frecuencia que la indicada por el médico.

Si tomas ivermectina para el tratamiento de la estrongiloidiasis, tendrás que hacerte análisis de materia fecal al menos tres veces durante los primeros 3 meses después del tratamiento para determinar si la infección ha desaparecido. Si persiste, es probable que el médico te recete otras dosis del medicamento.

ANTES DE TOMAR IVERMECTINA:

· Informa al doctor si eres alérgico a la ivermectina o a cualquier otro medicamento.

· Comunícale al doctor qué otros medicamentos con y sin receta, vitaminas, suplementos nutricionales y productos herbales estás tomando o piensas tomar. No olvides mencionar si estás tomando medicamentos para tratar la ansiedad, enfermedades mentales o convulsiones; relajantes musculares; sedantes; píldoras para dormir o tranquilizantes.

· Dile al doctor si tienes o alguna vez has tenido meningitis, tripanosomiasis humana africana (enfermedad del sueño; infección que se transmite por la picadura de la mosca tsetsé en ciertos países africanos) o trastornos que afectan el sistema inmunológico, como el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).

· Hazle saber al doctor si estás embarazada, planeas estarlo o estás amamantando. Si quedas embarazada durante el tratamiento con ivermectina, llama al doctor.

· Pregúntale al médico si es prudente consumir bebidas alcohólicas mientras estás tomando ivermectina.

· Si empleas ivermectina para la oncocercosis, ten en cuenta que puedes sentir mareos, vértigo y desvanecimiento si te incorporas con rapidez después de haber estado acostado. Para evitar este problema, levántate de la cama lentamente y apoya los pies en el piso unos minutos antes de incorporarte.

· Si tomas ivermectina para la estrongiloidiasis y has tenido loiasis (infección por loa loa, causada por un tipo de gusano que ocasiona problemas de la piel y los ojos) o si alguna vez viviste o viajaste en las regiones de África Occidental o Central donde la loiasis es común, debes tener en cuenta que podrías tener una reacción grave. Llama al médico de inmediato si presentas visión borrosa, dolor de cabeza o cuello, convulsiones o dificultad para caminar o estar de pie.

La ivermectina puede provocar efectos secundarios. Informa al médico si cualquiera de estos síntomas es grave o no desaparece:

· Mareos

· Pérdida de apetito

· Náuseas

· Vómitos

· Dolor o hinchazón estomacal

· Diarrea

· Estreñimiento

· Debilidad

· Somnolencia

· Temblor incontrolable de alguna parte del cuerpo

· Molestias en el pecho

Si tomas ivermectina para tratar la oncocercosis, también puedes presentar los siguientes efectos secundarios. Informa al médico si cualquiera de estos síntomas es grave o no desaparece:

· Hinchazón de ojos, cara, brazos, manos, pies, tobillos o pantorrillas

· Dolor e inflamación en las articulaciones

· Dolor e inflamación de las glándulas del cuello, axilas o entrepierna

· Frecuencia cardíaca acelerada

· Dolor, enrojecimiento o lagrimeo de ojos

· Hinchazón de ojos o párpados

· Sensación anormal en los ojos

Algunos efectos secundarios pueden ser graves. Si presentas uno de estos síntomas, ponte en contacto con el doctor de inmediato:

· Fiebre

· Ampollas o descamación de la piel

· Sarpullido

· Urticaria

· Comezón

Si la víctima se ha desmayado, tiene convulsiones, dificultad para respirar o no puede despertarse, llama inmediatamente a los servicios de emergencia al 911.

Los síntomas de sobredosis son:

· Sarpullido

· Urticaria

· Convulsiones

· Dolor de cabeza

· Hormigueo en pies o manos

· Debilidad

· Pérdida de coordinación

· Dolor de estómago

· Náuseas

· Vómitos

· Diarrea

· Mareos

· Falta de aliento

· Hinchazón de cara, brazos, manos, pies, tobillos o pantorrillas

Conserva este medicamento en su envase, bien cerrado y fuera del alcance de los niños. Es recomendable mantenerlo a temperatura ambiente y lejos del calor excesivo y la humedad (no en el baño).