El fluconazol se usa para tratar las infecciones por hongos, incluidas las infecciones por levaduras de la vagina, la boca, la garganta, el esófago (el conducto que va desde la boca hasta el estómago), el abdomen (el área entre el pecho y la cintura), los pulmones, la sangre y otros órganos.
También se emplea para tratar la meningitis (infección de las membranas que recubren el cerebro y la columna vertebral) provocada por hongos.
Se utiliza, además, para prevenir las infecciones por levaduras en pacientes que es probable que se infecten porque están siendo tratados con quimioterapia o radioterapia antes de un trasplante de médula ósea (reemplazo del tejido esponjoso enfermo dentro de los huesos con tejido sano).
El fluconazol pertenece a una clase de antimicóticos llamados triazoles. Actúa haciendo más lento el crecimiento de los hongos que causan la infección.
A veces, también se usa para tratar infecciones graves por hongos, que comienzan en los pulmones y pueden propagarse a través del cuerpo, e infecciones por hongos en los ojos, la piel y las uñas.
En ocasiones se emplea para prevenir las infecciones por hongos en las personas que son más propensas a enfermarse porque tienen el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) o cáncer o han tenido una operación de trasplante (cirugía para extraer un órgano y reemplazarlo con el órgano de un donante o con un órgano artificial).
La presentación del fluconazol es en tabletas y en una suspensión (líquido) para administrarse por vía oral. Por lo general, suele tomarse con o sin alimentos, una vez al día.
Quizás debas tomar una sola dosis de fluconazol o usarlo durante varias semanas o más. La duración del tratamiento depende de su afección y de qué tan bien responde al fármaco. Sigue atentamente las instrucciones del medicamento recetado. No aumentes ni disminuyas la dosis, ni la tomes con más frecuencia que la indicada por el médico.
Es posible que te indiquen una dosis doble de fluconazol el primer día de tratamiento.
Agita bien el líquido antes de cada uso para mezclar uniformemente el medicamento.
Deberías comenzar a sentirte mejor a los pocos días de iniciar el tratamiento. Si los síntomas no mejoran, o si empeoran, llama al médico.
No dejes de tomar fluconazol sin consultar al médico. Si dejas de hacerlo demasiado pronto, es posible que la infección regrese después de poco tiempo.
ANTES DE TOMAR FLUCONAZOL:
· Informa al médico si eres alérgico al fluconazol, a otros medicamentos antimicóticos como el itraconazol (Sporanox), ketoconazol (Nizoral), posaconazol (Noxafil) o voriconazol (Vfend), a algún otro medicamento o a alguno de los ingredientes en las tabletas o en la suspensión de fluconazol.
· Comunícale al doctor si estás tomando astemizol (Hismanal) (no se vende en los EE. UU.), cisaprida (Propulsid), eritromicina (E.E.S., E-Mycin, Erythrocin); pimozida (Orap), quinidina (Quinidex) o terfenadina (Seldane). Es probable que el médico te indique no tomar fluconazol si estás usando alguno de estos fármacos.
· Hazle saber al doctor qué medicamentos con y sin receta, vitaminas, suplementos nutricionales y productos herbarios estás tomando o planeas tomar. No olvides mencionar ninguno de los siguientes: amitriptilina; anfotericina B (Abelcet, AmBisome); anticoagulantes (“diluyentes de la sangre”) como warfarina (Coumadin, Jantoven); bloqueadores de los canales de calcio, como amlodipina (Norvasc, en Caduet, en Lotrel, otros), felodipina, isradipina y nifedipina (Adalat, Afeditab, Procardia); carbamazepina (Carbatrol, Epitol, Equetro, Tegretol); celecoxib (Celebrex, en Consensi); medicamentos reductores del colesterol (estatinas), como atorvastatina (Lipitor, en Caduet), fluvastatina (Lescol) y simvastatina (Zocor, en Vytorin); ciclofosfamida; ciclosporina (Gengraf, Neoral, Sandimmune); diuréticos (“pastillas contra la retención de agua”) como hidroclorotiazida (Microzide, en Diovan HCT, en Tribenzor, otros); fentanilo (Actiq, Duragesic, Fentora, Sublimaze, Subsys, otros); isoniazida (Laniazid, en Rifamate, en Rifater); losartán (Cozaar, en Hyzaar); metadona (Methadose); midazolam (Seizalam); nevirapina (Viramune); medicamentos antiinflamatorios no esteroides (NSAID, por sus siglas en inglés) como ibuprofeno (Advil, Motrin, otros) y naproxeno (Aleve, Anaprox, Naprelan, en Treximet, en Vimovo); anticonceptivos orales (píldoras anticonceptivas); medicamentos orales para la diabetes como glipizida (Glucotrol), gliburida (Diabeta, Glynase) y tolbutamida; nortriptilina (Pamelor); fenitoína (Dilantin, Phenytek); prednisona (Rayos); rifabutina (Mycobutin); rifampina (Rifadin, Rimactane, en Rifamate, en Rifater); saquinavir (Invirase); sirolimús (Rapamune); tacrolimús (Astagraf, Prograf); teofilina (Elixophyllin, Theo-24, Theocron); tofacitinib (Xeljanz); triazolam (Halcion); ácido valproico (Depakene, Depakote); vinblastina; vincristina (Marqibo); vitamina A; voriconazol (Vfend); y zidovudina (Retrovir, en Combivir, en Trizivir). Es posible que el médico deba cambiar las dosis de tus medicamentos.
· Informa al doctor si tienes o alguna vez has tenido cáncer; el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA); latidos cardíacos irregulares; niveles bajos de calcio, sodio, magnesio o potasio en la sangre; afecciones hereditarias poco comunes en las que el cuerpo no puede tolerar la lactosa o la sacarosa; o enfermedad del corazón, de los riñones o del hígado.
· Hazle saber al médico si estás embarazada, sobre todo si estás en los primeros 3 meses, si planeas quedar embarazada o si estás dando el pecho. Es posible que el médico te indique usar anticonceptivos para evitar los embarazos durante el tratamiento y durante 1 semana después de tu dosis final. Si quedas embarazada mientras toma fluconazol, llama al médico de inmediato. Este fármaco puede causar daños al feto.
· Si te vas a realizar una cirugía, incluso una cirugía dental, informa al médico o al dentista que estás tomando fluconazol.
· Ten en cuenta que este fármaco puede provocar mareos o convulsiones. No conduzcas vehículos ni operes maquinaria hasta que sepas cómo te afecta.
El fluconazol puede provocar efectos secundarios. Comunícale al médico si alguno de estos síntomas es intenso o no desaparece:
· Dolor de cabeza
· Mareos
· Diarrea
· Dolor de estómago
· Acidez estomacal
· Cambios en la capacidad para percibir los sabores de los alimentos
Algunos efectos secundarios pueden ser graves. Si presentas alguno de los siguientes síntomas, llama al médico de inmediato o busca tratamiento de emergencia:
· Náuseas
· Vómitos
· Cansancio extremo
· Sangrado o moretones inusuales
· Falta de energía
· Pérdida del apetito
· Dolor en la parte superior derecha del abdomen
· Coloración amarillenta en la piel o los ojos
· Síntomas parecidos a los de la gripe
· Orina de color oscuro
· Heces de color pálido
· Convulsiones
· Sarpullido
· Ampollas o descamación de la piel
· Urticaria
· Comezón
· Inflamación de la cara, la garganta, la lengua, los labios, los ojos, las manos, los pies, los tobillos o las pantorrillas
· Dificultad para respirar o tragar
Si la víctima se ha desmayado, tiene convulsiones, dificultad para respirar o no puede despertarse, llama inmediatamente a los servicios de emergencia al 911.
Los síntomas de sobredosis pueden incluir los siguientes:
· Alucinaciones (ver cosas o escuchar voces que no existen)
· Temor intenso a que otras personas quieran hacerle daño
Conserva este medicamento en su envase, bien cerrado y fuera del alcance de los niños. Es recomendable mantenerlo a temperatura ambiente y lejos del calor excesivo y la humedad (no en el baño).
Desecha todos los fármacos que estén vencidos o que ya no necesites. Elimina el medicamento líquido que no hayas usado después de 14 días.
Datos importantes que debes conocer
Es importante que mantengas una lista escrita de todas las medicinas que estás tomando, incluyendo las que recibiste con receta médica y las que compraste sin receta, dígase vitaminas y suplementos de dieta. Debes tener la lista cada vez que visites tu médico o cuando seas admitido a un hospital. Esta es una información importante en casos de emergencia.
Nombres comerciales por los que se conoce
· Diflucan®